Recuerdo que mi colegio, en los setenta, fue de los primeros por aquí en eso que se conoce como «integración». Se lo podía permitir, imagino. Era privado, pequeño y progresista. Y había pocos niños, sí, de «integración», pero los había, autistas y síndrome de Down. Eran más pequeños que yo, la integración empezó unos pocos años después.
Tengo recuerdos algo borrados, ya, durante todo un curso, uno de esos niños se subía al autobús y venía a sentarse a mi lado. No me acuerdo por qué. Imagino que le contaría alguna historia o le daría la mano o fue casualidad. No recuerdo cómo empezó, transcurrió con placidez y no recuerdo cómo acabó, supongo que con el cambio de curso, el verano largo de aquellos años escolares.
Hablo ahora esto porque mañana, en Oviedo, en el teatro Filarmónica, a partir de las siete de la tarde, con entradas a 10 euros, se celebra una gala para conmemorar el Día Mundial de las Personas con Síndrome de Down y los treinta años de la Asociación Down Principado de Asturias. Y está el objeto de la gala y está Pelayo, que se sentaba conmigo en el autobús, le contaría alguna historia, le daría la mano, sería casualidad. Y está Jote, padre de Irene, que es un entusiasta de los desayunos. Y están Camino y Enrique y Pablo y Paula. Y más gente.
Pero esta que he nombrado nos ayuda para que podamos abrir los desayunos cada día que hay colegio, aun sin habérselo pedido, porque hay quien piensa que buscamos expresamente las puertas que se nos abren y, no, lo único que hacemos es tener coraje para llamar, como se cuenta en una canción.
Es lo único que hacemos. Y estas personas, y muchas más, acuden.
Y tengo que estar mañana en el Filarmónica con mi hija. Por aquel recuerdo de Pelayo en el autobús y por Jote y por Irene y por la gente que escucha y se acerca. Y como soy la madre y caso, ya sabemos, el justito, Paula Rojo me está haciendo el trabajo que yo intento, pero con Paula sin que ella piense que la estoy adoctrinando. Mi hija aún no lo sabe, pero lo que le está enseñando Paula le servirá en los momentos buenos y será un alivio en los malos. Paula Rojo, con su magnífica banda, le está enseñando cómo se camina con unas camperas y qué es eso del rock and roll.
La ventana de Asturias – Cadena SER – 20 de marzo de 2015.